¿Nos están engañando con el CINE en 3D?



Todos hemos oído hablar de AVATAR, la película de James Cameron. Muchos la hemos visto. Esta película ha supuesto un antes y un después en el visionado de películas en 3D en las salas de cine. El éxito y, sobre todo, la recaudación de la película, ha hecho que los estudios de Hollywood se apunten, definitivamente, a esta tecnología. 

Dichos estudios han visto que la gente está dispuesta a pagar un poco más por ver las películas en formato tridimensional. Por ello han anunciado muchas películas que se estrenaran en este formato. El problema que la gran mayoría de esas películas no se han rodado en 3D. 


 Sí, no es broma. Lo que hacen los estudios es una "conversión informática"  o "dimensionalización", que consiste en transformar una película tradicional en 3D. Evidentemente la calidad entre un sistema y otro no tiene comparación.

Si el sistema es peor, ¿por qué lo hacen?. Evidentemente por el dinero. En la dimensionalización se aplica un software que actúa con un patrón de uniformidad y el efecto resultante es el mismo, independientemente de la secuencia que se esté viendo. Dicho patrón podría aplicarse plano por plano, pero los costes serían mucho mayores. En cuanto a rodar directamente en 3D, eso supone un coste un 30% mayor que el rodaje en 2D.

Dos películas que han sufrido este efecto de "conversión" son Alicia en el país de las Maravillas y Furia de Titanes. En la primera, ha habido muchas quejas de los espectadores porque la consideran la versión 3D bastante oscura, problema que no presenta su la versión tradicional.


En Furía de Titanes los problemas ha sido mayores. Las secuencias de acción no habían sido concebidas para el formato y presenta ciertos problemas dimensionales que afectan a la percepción del tamaño de los personajes en pantalla, tal y como afirmaba el crítico Javier Ocaña.


Todo porque, por las prisas del estudio, el proceso de transformación de 2D a 3D se realizó en tan solo 10 semanas , cuando los expertos afirman que para hacerlo correctamente se necesitaría mucho más tiempo. 

El más crítico con esto está siendo James Cameron, que ha dicho: "Si quieres hacer una película en 3D, ruédala en 3D. Este es el típico ejemplo de Hollywood haciendo algo mal". A los estudios eso no les importa porque, para ellos, lo principal es el dinero, no los espectadores. Recordemos que la recaudación en taquilla de EE.UU.  ha crecido en un diez por ciento en el primer trimestre de 2010. En España, el precio de las entradas para películas en 3D puede incrementarse hasta en un 50% frente al de films tradicionales.

De nuevo estamos ante una nueva tecnología y ante nuevos engaños por parte de los poderosos. Ahora tendremos que fijarnos bien para ver si nos merece la pena ver una película en 3D............ una pena.

Vía:tuexperto.com