La Empresa Municipal de Estacionamiento de Lisboa (EMEL) ha empezado a vender los parquímetros individuales portátiles, llamados SmartPark. Para utilizar el SmartPark, el condutor tiene que introducir la tarjeta en el aparato y volver a retirarla, llevándola consigo, y dejar el pequeño parquímetro en un lugar visible. El importe relativo al estacionamiento se descuenta en el siguiente uso.
Para el presidente de la empresa pública, Antonio Almeida, este es un "sistema más justo", ya que el conductor no tiene que preocuparse por la falta o el exceso de dinero que le costará el estacionamiento, como pasa normalmente. Se pagará por el tiempo que se esté, ni más ni menos.
Durante la fase de lanzamiento, los parquímetros costarán 32 euros e incluirán una tarjeta desechable por valor de 30 euros. A finales de la semana pasada ya se habían realizado unas 500 solicitudes de reservas y se espera que, para finales de año, se coloquen en el mercado de tres a cuatro mil unidades.
Vía:Expresso